Derechos de los padres por cuidar a hijos enfermos

Una de las principales preocupaciones de los padres durante el curso escolar es que sus hijos no se pongan enfermos, sobre todo cuando ambas partes trabajan. Este dilema se acentúa en invierno, ya que es la época en la que aparecen la mayoría de las enfermedades comunes que afectan a los niños como la bronquiolitis, la laringitis, gastroenteritis…

Este tipo de afecciones no suelen ser graves, pero sí requieren de tratamiento, reposo y descanso por parte del enfermo, y es aquí cuando la mayoría de padres trabajadores no saben cómo organizarse para cuidar de sus hijos enfermos.

¿Tenemos los trabajadores derecho a ausentarnos del trabajo para cuidar de los hijos?

Para responder esta pregunta debemos recurrir al Estatuto de los Trabajadores que dice que: “El trabajador, previo aviso y justificación, podrá ausentarse del trabajo, con derecho a remuneración de dos días por el nacimiento de hijo y por el fallecimiento, accidente o enfermedad graves, hospitalización o intervención quirúrgica sin hospitalización que precise reposo domiciliario, de parientes hasta el segundo grado de consanguinidad o afinidad. Cuando con tal motivo el trabajador necesite hacer un desplazamiento al efecto, el plazo será de cuatro días”.

También a los funcionarios, por fallecimiento, accidente o enfermedad grave de un familiar dentro del primer grado de consanguinidad o afinad, les corresponderán tres días hábiles cuando el suceso se produzca en la misma localidad, y cinco días hábiles cuando sea en distinta localidad. Cuando se trate del fallecimiento, accidente o enfermedad grave de un familiar dentro del segundo grado de consanguinidad o afinidad, el permiso será de dos días hábiles cuando se produzca en la misma localidad y de cuatro días hábiles cuando sea en distinta localidad.

Por tanto, según el Estatuto de los Trabajadores, a los padres no les corresponde ni un solo día de permiso si sus hijos contraen enfermedades comunes no graves.

¿Qué hacer entonces?

Ante esta situación, para la mayoría de padres trabajadores es muy complicado conciliar el trabajo con el cuidado de un hijo enfermo y es por ello, que una de las soluciones es recurrir a los abuelos o a familiares que puedan hacerse cargo del niño.

Por desgracia, no todos pueden contar con abuelos o demás familiares cerca con los que dejar a sus hijos y deben contratar a un cuidador o cuidadora. Normalmente, estas familias ya suelen contar con alguien de confianza que se encargue de recoger a los niños del cole, los cuide en momentos puntuales o durante las vacaciones de los niños.

Otra opción es recurrir a los días por asuntos propios que corresponden al trabajador, pedir permisos sin sueldo o incluso, en algunos trabajos, pedir realizar el trabajo desde casa para poder cuidar del niño mientras esté enfermo.

¿Cómo te organizas cuando tu peque está enfermo? ¿Eres de los que tiene ayuda de abuelos y familiares, o por el contrario cuentas con un cuidador de confianza? ¿Crees que se debería regular esta situación en el Estatuto de los Trabajadores?